¿Buscas un postre auténtico, fácil de hacer y absolutamente delicioso? Si es así, estás en el lugar adecuado. Hoy, compartiré contigo la receta de un postre gallego clásico: la tarta Santiago. Esta rica tarta de almendra no sólo es hermosa, sino que también está deliciosa. Tanto si tienes prevista una cena especial como si sólo quieres impresionar a tus amigos con un postre inesperado, éste es el postre perfecto.
¿Qué es la Tarta Santiago?
La Tarta Santiago, también conocida como Tarta de Almendra, es un postre tradicional de la región de Galicia, en el noroeste de España. Esta rica y húmeda tarta se elabora con almendras molidas, azúcar, huevos y ralladura de limón, lo que le confiere un sabor ligero y vibrante. Cuenta la leyenda que la receta se remonta a la Edad Media, cuando se elaboraba como un dulce obsequio para los peregrinos que viajaban a Santiago de Compostela, el famoso destino de peregrinación. Hoy, este postre a base de almendras sigue siendo una elección popular para ocasiones especiales en Galicia.
Los ingredientes que necesitarás
Como postre tradicional, la Tarta Santiago se puede hacer con ingredientes básicos que la mayoría de las cocinas tienen a mano. Necesitarás una taza de almendras molidas, una taza de azúcar, cuatro huevos grandes, la ralladura de un limón y una pizca de sal. También puedes hacer un adorno opcional con azúcar glas y almendras molidas. Además de estos ingredientes, necesitarás un molde para tarta redondo o un molde cuadrado de 9 pulgadas.
Cómo preparar Tarta Santiago
Prepara el horno y engrasa el molde para tarta. En un bol grande, mezcla las almendras molidas, el azúcar, la ralladura de limón y la pizca de sal. Haz un pozo en el centro de la mezcla y añade los huevos. Mezcla suavemente todo hasta formar una masa suave y uniforme. Vierte la masa en el molde preparado y alísala. Hornear durante 25-30 minutos, o hasta que la tarta esté dorada y al introducir un palillo en el centro éste salga limpio. Deja que la tarta se enfríe un poco antes de cortarla en trozos.
Guarnición opcional
Una sencilla guarnición con azúcar glas y almendras molidas puede realmente elevar la presentación de tu Tarta Santiago. Una vez fría, tamiza azúcar glas sobre la tarta. A continuación, espolvorea almendras molidas sobre el azúcar en un patrón decorativo. Esto no sólo hará que tu tarta sea más bonita, sino que también le añadirá un poco más de textura y sabor.
Servir y guardar Tarta Santiago
La Tarta Santiago se disfruta más recién hecha, aunque también se puede servir a temperatura ambiente o fría. Para servirla, córtala en pequeñas porciones y acompáñala de una bola de helado de vainilla o almendra. Si te sobra, puedes guardarla en un recipiente hermético en el frigorífico durante un máximo de tres días.
¡Y listo! Con unos pocos ingredientes y pasos sencillos, puedes hacer una Tarta Santiago absolutamente deliciosa que impresionará a tus amigos y familiares. Así que, la próxima vez que quieras preparar un postre auténtico y delicioso, prueba con este postre gallego clásico. ¡Disfruta!